Escribo hoy, no por el día en sí, si no por las ansias y la nostalgia que me da hacerlo.
Algunas cosas han cambiado:
-Ya no estoy en mi querido MacBook, porque el pobre ha decidido medio morir. Estoy en el windows de sobremesa de casi toda la vida, propiedad de mi hermano.
-He cambiado de edad. Tengo 21 años y se supone que soy lo suficientemente madura como para considerarme mayor en Estados Unidos. Eso sí, sigo sin saber comportarme como una verdadera adulta.
-He aprobado un examen de los 7 que tengo. No es que haya suspendido los otros, si no que aún no han pasado. Así es, estoy en época de exámenes.
-Me siento mucho mejor conmigo misma que hace un par de meses, algo que agradezco de sobremanera.
-Cada vez me siento más veterinaria, aunque el mundo del estudiante tenga injusticias como catedrales.
-Y por último, diré que mi Evelyne Gaudet sobrevivió a su partida de Cthulhu, y el lunes volveré a hacerla pasar por una nueva aventura en la que puede que no llegue a ver el sol.
Anoche me pasé por la acampada en plaza catalunya impulsada por la plataforma: Democracia Real Ya. Sin duda, algo digno de ver y de vivir. ¿Alguien había pensado alguna vez que viviría algo parecido? ¿De verdad no podría ser que en unos años, en historia contemporánea, los alumnos tengan que estudiar la revolución del 15M como un movimiento del pueblo, una queja al sistema actual?
Pronto podremos saber si las cosas salen mal, y más tardaremos en ver el peso de lo ocurrido desde ese 15-M en que unos cuantos locos decidieron que acampar en la Puerta del Sol era una buena manera de protestar.
Hasta entonces, si podéis, acercaos a alguna de las concentraciones ciudadanas que se están llevando a cabo en todas las ciudades y pueblos de España. Si estáis de acuerdo, apoyad la causa. Yo, si puedo despegarme un rato de los apuntes, intentaré volver a pasarme.
Y mañana elecciones. Nadie debería quedarse en casa. Todos a votar.
